Cuál es el papel del futuro papá en el embarazo

Durante los nueve meses que dura el embarazo la mujer sufre alteraciones hormonales y cambios corporales, añadidos a la responsabilidad, la incertidumbre y la ansiedad que experimentan en este proceso, un trámite que no es fácil de asumir, sobre todo, los primeros meses. Llegados a este punto, algunos hombres empatizan con su pareja y sienten síntomas similares pero no suele ser lo habitual. Generalmente, muchos hombres se cuestionan cómo deberían de actuar, si es mejor tomar distancia para que su pareja tenga espacio o es preferible adoptar el rol servicial para procurarle todo lo necesario.

Para que el procedimiento sea más llevadero es necesaria la complicidad y la empatía del hombre desde el primer momento, con miras a que la gestante se sienta bien. Es importante que el futuro padre acompañe a su mujer a las ecografías, asista con ella a las clases de preparación al parto y comparta lecturas sobre el embarazo extraídas de libros o revistas especializadas. Es necesario que los dos individuos que se embarcan en la aventura de la maternidad sean conscientes de todo lo que conlleva y tomen conciencia de aquellos alimentos que no se pueden consumir o las acciones que no se pueden llevar a cabo.

Aunque suene a tópico, el hombre tiene el deber de apoyar a su pareja, tener en consideración sus necesidades y satisfacerlas en la medida que pueda, desde los antojos más inusuales a los caprichos más necesarios. Son meses complejos que requieren de cariño para vivir desde un prisma positivo el periodo gestacional. Por tanto, es fundamental la existencia de un pilar que sirva de apoyo y, sobre todo, que permita a la mujer reafirmarse y  que pueda seguir sintiéndote bella, pese a los cambios que alteran su cuerpo.

En este sentido, según los psicólogos, la gestión de emociones y el control de la situación anímica favorece la gestación y crea una atmosfera agradable y única, tanto para la gestante como el acompañante, que les permite relajarse y dejarse llevar por el que probablemente será el momento más bonito de sus vidas, experimentando el vínculo con el bebé desde el vientre materno.

Superado el periodo de adaptación, que oscila los primeros cuatro meses, la mujer asimila su nueva realidad y la disfruta plenamente al lado de su pareja, que ha estado acompañándole durante todo el proceso. Durante esta etapa acompañar a la mujer a las clases de preparación del parto es vital para conocer la manera de tranquilizarle llegado el momento del alumbramiento, lo que le proporcionará las suficientes tablas al futuro padre sobre la actuación que se realiza en estos casos.

Hacía la mitad del embarazo, cuando el feto ya tiene desarrollado el  sistema auditivo y empieza a escuchar ruidos del exterior, es un buen momento para que el futuro papá empiece a relacionarse, mediante la voz, así cuando nazca la reconocerá. Por supuesto, no existe una receta mágica que se pueda aplicar a todas las parejas del mundo porque intervienen diversos factores, no obstante, esperamos que estos consejos os sirvan de utilidad para afrontar la situación con optimismo, lo que seguro os garantizará el éxito.