La dieta mediterránea y la fertilidad
Está ampliamente comprobado que existen ciertos alimentos que se alían con la fertilidad y otros que pueden contribuir a comprometerla. Una de las dietas más completas y beneficiosas para el organismo a nivel general es la llamada dieta mediterránea.
Tal y como recuerda la dietista-nutricionista Gemma Tendero (@gemmatendero_dn) ésta se caracteriza por una alimentación “basada en frutas y verduras, aceite de oliva, frutos secos, legumbres, cereales, pescado y vino”.
En este sentido, conviene detenerse en el vino. Si bien existen estudios sobre la conveniencia o no de acompañar las comidas con un poco de esta bebida, lo cierto es que el alcohol no es en absoluto aconsejable para quienes buscan un bebé. Tendero explica que “no solo no ayuda a mejorar la fertilidad, sino también puede impedir conseguir un embarazo”.
Sin embargo, las alicantinas que quieren convertirse en madres muy probablemente apostaran por menús basados en una dieta saludable tan típica en esa zona de España. Las verduras no pueden faltar, especialmente las que aportan una gran cantidad de ácido fólico, como pueden serla col rizada, las hojas de nabo, la lechuga o el brócoli. Esta última crucífera, de hecho, aumenta la producción de testosterona, lo que está relacionado con la fertilidad masculina y con una mayor cantidad de esperma.
En todo caso, la experta en nutrición advierte de que la población en general “sigue una dieta occidentalizada, donde predominan los cereales refinados, las carnes, la comida rápida y la bollería industrial, en detrimento de los alimentos básicos de la dieta mediterránea y de cualquier dieta saludable en realidad”.
Precisamente, “la evidencia sugiere que una alimentación equilibrada, junto con la realización de ejercicio reduce el peso corporal y la grasa abdominal”, mantiene Gemma Tendero.
Para conocer los próximos temas de nuestro blog, síguenos en facebook o twitter.
No Comments
Deja un comentario