¿Cuál es el mejor ciclo para mí?

En materia de medicina reproductiva, la elección del tratamiento más adecuado para una mujer que tenga dificultad para quedar embarazada, es una decisión de capital importancia, y decisiva a la hora de lograr la tan deseada maternidad.

Son muchos los factores que son importantes, a la hora de que el especialista en medicina reproductiva elija el tratamiento más adecuado.

La edad de la paciente es el primero y fundamental a tomar en cuenta, ya que tanto la reserva ovárica, como la calidad del ovocito, disminuyen con la edad; y cada vez más las mujeres postergan la búsqueda del embarazo, motivado a distintas razones como: estabilidad laboral, estudios, consolidación de la vida de pareja etc…

Una baja reserva ovárica, es motivo de elección de una técnica más compleja como el FIV, que incluye protocolos más especializados, para intentar obtener ovocitos, que puedan ser fecundados en el laboratorio, y posteriormente ser transferidos a la futura madre.

El tener alguna patología, como por ejemplo: obstrucción tubárica, por antecedente de alguna infección ginecóloga, es motivo de elección de un tratamiento de Fertilización in Vitro, ante la imposibilidad de una técnica menos compleja, como es la inseminación artificial.

Una mujer joven, con buena reserva ovárica y un aparato reproductor sano, puede ser valorada para una técnica menos compleja como pueden ser la de inseminación, inclusive los coitos dirigidos.

También de la calidad del semen de su pareja, puede derivar en una técnica u otra, como por ejemplo si la pareja masculina sufre una alteración de la calidad espermática como: la Astenozoospermia u Oligozoospermia (bajo recuento en la motilidad y baja cantidad de espermatozoides respectivamente), se podrá elegir la técnica del ICSI, en la cual, los espermatozoides son micro inyectados directamente en el ovocito, para asegurarse que aumente la probabilidad de fecundación, por la elección de los espermatozoides de mejor calidad.

En resumen hay un gran abanico de técnicas hoy en día que pueden ser utilizadas, según sea el diagnóstico o la causa que produzca el problema de no lograr el embarazo de forma natural, y es el especialista en medicina reproductiva quien estudiará e instaurará a la paciente el más adecuado.