Problemas para alcanzar el orgasmo femenino
Hoy, 8 de agosto, se conmemora el Día Internacional del Orgasmo Femenino, para algunas mujeres todavía desconocido. Según el último estudio realizado por sexólogos de la Universidad de Kansas y publicado en el último número del Journal of Sex Research, el 33% de los hombres y el 68% de las mujeres aseguraron haber fingido un orgasmo alguna vez en la cama.
Muchos son los motivos que pueden llevar a incurrir a esta práctica como, por ejemplo, la anorgasmia o la dispaurenia. La primera se trata de la ausencia del orgasmo de la mujer durante las relaciones sexuales. Esta puede producirse, según los especialistas, tanto por factores físicos o psicológicos, propiciados por miedos, tensiones o inseguridades, así como por una diabetes mellitus.
En otros casos, algunas mujeres experimentan dolor o les cuesta alcanzar al orgasmo llegada una determinada edad o en un momento concreto, lo que ocurre frecuentemente por problemas sexuales como la dispaurenia, muy asociada a dos periodos clave en la vida de una mujer, el posparto y la menopausia.
Esta disfunción sexual hace que las mujeres padezcan molestias durante el coito que, a menudo, son producidas por infecciones, lesiones uterinas, falta de excitación o incluso una penetración inadecuada. Para paliar los síntomas de esta dolencia, los ginecólogos recomiendan usar lubricantes genitales para humedecer la zona vaginal y facilitar la penetración, sin que esta sea dolorosa para los miembros de la pareja.
Asimismo, otro problema sexual que confluye en los mismos síntomas es el miedo a la penetración o vaginismo. Este fenómeno se da cuando los músculos pélvicos se contraen de forma involuntaria, lo que ocurre no solo por momentos puntuales como la penetración, sino también durante una exploración ginecológica o al colocar un cuerpo extraño como puede ser un tampón. Los motivos que lo causan son múltiples, desde el miedo al dolor, los prejuicios, una mala experiencia sexual, etcétera.
En este caso concreto el tratamiento es diferente, ya que se basa en el apoyo psicológico a la paciente, mediante terapia individual o en pareja. Un sexólogo comparte indicaciones básicas con ambos, para que poco a poco superen los miedos y enriquezcan su intimidad.
Orgasmo femenino y fertilidad
Circulan muchas hipótesis en torno a si el orgasmo femenino tiene una relación directa con la fertilidad y favorece el embarazo, pero lo cierto es que ninguna es concluyente. Pues según señalan unos estudios, acostarse después del coito favorece la movilidad de los espermatozoides y, por tanto, la posibilidad de concebir. Mientras otra teoría, igualmente válida, revela que acostarse después del coito no parece mejorar la retención de esperma. Por tanto, tener o no un orgasmo no garantiza que se pueda conseguir un embarazo.
No Comments
Deja un comentario