Movimientos fetales, ¿cuándo empiezan y cómo son?

Los movimientos fetales percibidos por la madre son, sin duda alguna, el signo fetal que más emociona a una mujer gestante. Intuitivamente la madre relaciona los movimientos de su bebé, como sinónimo de bienestar fetal. Desde la semana 6ª del embarazo, el embrión comienza a realizar movimientos, los cuales no son percibidos por la madre. Pero entre las semanas 18-22, es el periodo en que estos movimientos son lo suficientemente enérgicos para ser notados por la mujer embarazada. En los casos de mujeres con embarazos previos, estos primeros movimientos fetales pueden ser percibidos, incluso en semanas previas (semana 16).La obesidad materna puede de forma contraria, postergar la percepción de estos primeros movimientos fetales, hasta la semana 24 inclusive.

A medida que trascurren las semanas de embarazo, se hacen cada vez más enérgicos, al ir adicionándose movimientos del tórax, extremidades superiores e inferiores y movimientos respiratorios. Pero a partir de la semana 28 aproximadamente, aunque aumente la fuerza e intensidad de los mismos, la madre notará que serán cada vez menos frecuentes, debido a los periodos de sueño fetal.

Toda embarazada, debe alertar a su médico si hay una disminución en el patrón de los  movimientos fetales. Algunas patologías como retardo en el crecimiento intrauterino, Hipoxia fetal (disminución en el aporte de oxígeno al feto por insuficiencia placentaria), entre otras; pueden ocasionar una disminución en dichos movimientos. Con menos de 10 por más de 12 horas seguidas o, en las siguientes dos horas después de una comida; se debe de informar antes de las 24 horas siguiente al personal de salud.

En resumen los movimientos fetales percibidos por la madre son un marcador confiable, no doloroso y no invasivo; a través del cual la madre puede monitorizar la salud de su bebé.